Que a Gordon Hayward le queda aun mucho camino por recorrer lo vimos ya en preseason, no es nuevo. Lo de ayer fue una nueva muestra de ello. Mucho miedo al penetrar, saltar, jugar con contacto,…Le faltó feeling con sus compañeros, lo que provocó varias pérdidas, se le escaparon rebotes aparentemente sencillos, …
Jugó inseguro y esa seguridad solo se la dará el paso de los minutos. Poco a poco, sin darse cuenta, perderá el miedo a hacer lo que hizo siempre, como le pasó, por ejemplo, a Paul George.
Es un proceso normal. No esperábamos ayer que 20 puntos saliesen de tiros suyos, solo esperábamos que el año empezase sin sustos. Si nosotros teníamos el corazón encogido por lo que pasó el año pasado, imaginad como lo tenían los tres de la fotografía: esposa, madre y padre de Gordon.
La imagen capta la realidad actual de Gordon: El miedo.
PD.- Por cierto, la señora Hayward es igualita a su hijo.